No existe un sexo débil. Sin embargo, a través de la educación y de la crianza a las mujeres se les ha permitido expresar con facilidad sensaciones y sentimientos como el llanto, la tristeza, el dolor, la ternura, cuyas manifestaciones han sido interpretadas como debilidad. No ha ocurrido igual con los hombres a quienes se les ha restringido esa posibilidad. Esta frase ha sido utilizada por personas machistas para subestimar la inteligencia y vulnerar los derechos de las mujeres. Pretende indicar que las mujeres tienen menos fuerza y capacidad que los hombres, que son más frágiles y sensibles. En el aspecto físico hay mujeres fuertes, así como hombres que carecen de fuerza. La inteligencia, la fuerza, la tenacidad, las habilidades para resolver conflictos y tomar decisiones son individuales y no tienen nada que ver con el sexo.
http://www.profamilia.org.co/004_servicios/preguntas.php?categoria_id=48&PHPSESSID=02f8d70f1e2d1fba05771ef5b498844d&pregunta_id=4
martes, 14 de octubre de 2008
¿Por qué se dice que los hombres pueden tener varias mujeres?
No es verdad que los hombres necesiten estar con varias mujeres para sentirse satisfechos. Tener una o varias parejas es una decisión que puede estar influenciada por la crianza, la educación, la forma de ser, los intereses, gustos y deseos que motivan a la persona en ese momento de su vida. No depende del sexo, tanto hombres como mujeres pueden decidir que desean tener múltiples parejas o permanecer con una sola. De cualquier forma, en el tema sexual tener varias parejas puede representar mayor riesgo de adquirir una Infección de Transmisión Sexual.
http://www.profamilia.org.co/004_servicios/preguntas.php?categoria_id=48&pregunta_id=7&PHPSESSID=02f8d70f1e2d1fba05771ef5b498844d
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¿Qué es y de dónde proviene el machismo?
El machismo es un conjunto de creencias, costumbres y actitudes que sostienen que el hombre es superior a la mujer en inteligencia, fuerza y capacidad. Es decir, asignan a las mujeres características de inferioridad. Por lo tanto quienes creen en el machismo o han sido educados en él, consideran que es el hombre quien tiene poder de decisión y elección, quien puede mandar y ordenar, conquistar y proponer en las relaciones afectivas y sexuales, quien debe recibir mayor retribución económica, entre otras creencias. Además, consideran que hay oficios para hombres y otros para mujeres, así como actividades exclusivas para hombres, por eso es usual escuchar que el hombre no debe asumir tareas del hogar (barrer, cocinar, planchar...) y que las mujeres no deben realizar tareas que impliquen el uso de la fuerza.
Las creencias machistas han pasado de generación en generación y por eso aún hoy muchas personas en distintas sociedades y culturas las conservan e incluso las ven como algo normal. En otros casos, el machismo ha permeado tanto la educación escolar, familiar y los medios de comunicación, que no se ve como una creencia sino como algo natural, es decir, se asume que biológicamente las mujeres son frágiles, dependientes e incapaces para desarrollar determinados trabajos u oficios. Sin embargo, muchas otras sociedades han relegado el machismo e intentan tener relaciones equitativas entre hombres y mujeres.
Por tratarse de una idea creada por las personas y la cultura, el machismo puede transformarse; pues hombres y mujeres tienen los mismos derechos y por lo tanto deben gozar de las mismas oportunidades.
http://www.profamilia.org.co/004_servicios/preguntas.php?categoria_id=48&pregunta_id=3
El machismo es un conjunto de creencias, costumbres y actitudes que sostienen que el hombre es superior a la mujer en inteligencia, fuerza y capacidad. Es decir, asignan a las mujeres características de inferioridad. Por lo tanto quienes creen en el machismo o han sido educados en él, consideran que es el hombre quien tiene poder de decisión y elección, quien puede mandar y ordenar, conquistar y proponer en las relaciones afectivas y sexuales, quien debe recibir mayor retribución económica, entre otras creencias. Además, consideran que hay oficios para hombres y otros para mujeres, así como actividades exclusivas para hombres, por eso es usual escuchar que el hombre no debe asumir tareas del hogar (barrer, cocinar, planchar...) y que las mujeres no deben realizar tareas que impliquen el uso de la fuerza.
Las creencias machistas han pasado de generación en generación y por eso aún hoy muchas personas en distintas sociedades y culturas las conservan e incluso las ven como algo normal. En otros casos, el machismo ha permeado tanto la educación escolar, familiar y los medios de comunicación, que no se ve como una creencia sino como algo natural, es decir, se asume que biológicamente las mujeres son frágiles, dependientes e incapaces para desarrollar determinados trabajos u oficios. Sin embargo, muchas otras sociedades han relegado el machismo e intentan tener relaciones equitativas entre hombres y mujeres.
Por tratarse de una idea creada por las personas y la cultura, el machismo puede transformarse; pues hombres y mujeres tienen los mismos derechos y por lo tanto deben gozar de las mismas oportunidades.
http://www.profamilia.org.co/004_servicios/preguntas.php?categoria_id=48&pregunta_id=3
Famosas Escandalosas
Las famosas de esta lista tienen muchas cosas en común. No solamente sus nobres son conocidos en el mundo entero y poseen una gran fortuna, sinó que además constantemente escuchamos y vemos en la prensa los escándalos que provocan. Ya sea intencional o accidentalmente, ellas siempre están generando nuevas noticias y sus rostros son sinónimo de escándalo.
Con una vida personal un poco descontrolada, una agenda que incluye salidas nocturnas, shows de televisión y agresiones con papparazzis, estas jóvenes estrellas de Hollywood no se aburren de ser el centro de atención.
Vale la pena analizar sus escándalos, ya sea que se trate de conducir ebrias, pelearse públicamente entre ellas o hasta pasar estadías en prisión. Tienen todo lo que podrían desear y aun así acaparan las portadas de las revistas con sus continuos episodios bizarros.
¿Por qué ellos muestran sus “trofeos de guerra”?
Tras el escándalo desatado entre los dipus, que fue publicado en forma exclusiva por el POPU (uno de ellos se pasó todo un día voi con un colaless en su bolsillo, exhibiéndolo como “trofeo de guerra”) el sexólogo Oscar Sapena cuenta porqué muchos arrieros actúan upéicha.
1- ¿Por qué hay hombres que gustan de tener “pruebas” de sus aventuras, para mostrarles a sus amigos?
-Hay que partir de dos aspectos, uno es que la autoestima del varón se eleva extraordinariamente cuando las relaciones sexuales son adecuadas, positivas y en segundo término tenemos que decir que toda relación sexual, sobre todo las adecuadas, son euforizantes. En nuestro cerebro se liberan sustancias denominadas neurotransmisores como las endorfinas, alfa y beta, que nos hacen sentir bien, en cambio cuando pasa mucho sin que tengamos relaciones sexuales no existe ese estímulo. El hombre se vuelve adicto a las sustancias euforizantes producidas por el acto sexual, entonces, cuantas más relaciones sexuales tenga, mejor. Se siente el rey de la creación, feliz, eufórico. Por el contrario se siente deprimido, fracasado cuando no tiene relaciones sexuales o sus relaciones sexuales no son buenas, porque no hay buena erección o eyacula rápido y no puede satisfacer a la mujer dándole su orgasmo.
2- ¿Es por inseguridad que cuentan sus aventuras o se toma como simple cabezudeada?
-No es por inseguridad, simplemente como expliqué, el hombre quiere sentirse bien, eufórico, muchas veces los éxitos sexuales le satisfacen mucho más que cualquier tipo de éxito y también hay que agregar que la sexualidad adecuada euforiza, pues dinero y poder van juntos.
3- Hay hombres que incluso coleccionan objetos íntimos como bombachitas, corpiños o pelos de pubis, ¿por qué?
-Eso puede ocurrir, incluso el solo hecho de recordar o de apreciar eso que llamás “trofeos” hace sentir al hombre con una autoestima elevada. Pero hay que acotar que no todos los hombres son así. Hay que aclarar que la sexualidad es muy variable, nosotros no podemos encasillar o uniformar las conductas sexuales de las personas sean hombres o mujeres, cada persona tiene su sexualidad muy peculiar, muy particular, muy “suya”.
4- Se habrá enterado del caso del diputado que estuvo durante toda una sesión del Congreso con un colaless en el bolsillo, mostrándoles a sus colegas, ¿se puede considerar que es broma entre hombres o algo más?
-La conducta sexual de las personas es muy variada, muy distinta. Hay personas que desean jactarse de sus aventuras sexuales, en cambio, otras son más reservadas.
5- Hay hasta chistes sobre el hecho de que los hombres disfrutan más de contar sus aventuras sexuales que de tenerlas, ¿por qué?
-Esa pregunta puede tener una doble interpretación, existen hombres que se reúnen entre ellos y se están jactando de sus aventuras sexuales y un poco más allá están las mujeres reunidas y las esposas o parejas de ese mismo hombre están afirmando que “fulano ya no funciona”. Eso se llama indromen, esto en sexología clínica se denomina “síndrome de farsa” sexual y tiende a ser muy común. Es muy difícil que el hombre asuma en su totalidad sus fracasos sexuales, los quiere encubrir, tergiversar, porque incluso esa manera de expresarse levanta su autoestima en cierto modo, se siente mejor contando falsas aventuras entre sus pares.
6- Algunos hombres llaman “trofeos de guerra” a la ropa íntima que les sacan a las mujeres con quienes se acostaron, ¿qué están queriendo decir con esa frase?
-También a esta pregunta podríamos dar 2 interpretaciones. Una es que ellos se sienten bien contando sus aventuras sexuales reales o imaginarias. Pero debemos agregar que existen personas que son fetichistas; esta es una variante de la conducta sexual en la cual la persona hombre o mujer se excita frente a la observación de estas prendas íntimas.
7- ¿Se creen más hombres por eso o es porque quieren fama de mujeriegos?
-No, lo que le hace sentir hombre al hombre es que su autoestima esté elevada por el cúmulo de sus conquistas sexuales y repetimos, que estas pueden ser reales o imaginarias.
8- ¿Qué pensaría la mayoría de los hombres de una mujer que muestre anatómicos como “trofeos de guerra”?
-Nosotros podemos tener la interpretación de que la mujer es fetichista y le gusta mostrar esos “trofeos”.
9- Dicen que las mujeres cuentan el milagro pero no el santo, y los hombres lo primero que cuentan es quién es la mujer con la que se acostaron, ¿es cierto y por qué es así?
-Es así, las mujeres generalmente son más reservadas en sus conquistas sexuales, el hombre en cambio desea publicarlas, esas son características diferenciales de la sexualidad masculina y femenina, pero también tenemos que aclarar todos estos aspectos que estamos afirmando no podemos “generalizarlos”.
10- También dicen que los hombres que cuentan sus aventuras lo hacen mientras no están enamorados, pero que cuando entregan el corazón no quieren hablar de la parte sexual. ¿Es así y por qué?
-Podría ser porque el enamoramiento implica que en el cerebro del hombre se segrega una hormona que se denomina “oxitocina” que es el neurotransmisor o neuro hormona del apego, del enamoramiento y el hombre puede tener relaciones sexuales con muchas mujeres, pero el apego o enamoramiento generalmente ocurre con una sola de ellas, y entonces el hombre no desea exponer a la luz pública la sexualidad de la persona de la cual está enamorada.
11- Mostrarse entre ellos tanguitas o contar detalles sexuales, ¿es una versión más adulta nomás de los “concursos de pene” o de apuntar y orinar que suelen hacer en su pubertad los chicos?
-Eso ya lo hemos contestado en una pregunta anterior.
¿Degenerados o normales?
12- ¿Qué clase de mujeres dejan que el hombre con quien están se lleve sus ropas íntimas, sabiendo que pueden mostrar por ahí?
-Es que muchas veces la mujer no puede oponerse al hecho simplemente.
13- ¿No es lo mismo que dejar que se las filme teniendo relaciones o desnuda?
-Esa es una variante de la conducta sexual de muchos hombres y que generalmente no agrada a la mujer. En mi práctica clínica he tenido mujeres que venían a expresar justamente su extrañeza y hasta malestar por el hecho de que el hombre desea filmar el acto sexual entre ellos, incluso hay hombres que van más allá, les gusta filmar el acto sexual de su pareja con otro hombre, lo cual lastima extraordinariamente a la mujer y desea por supuesto que el problema se resuelva adecuadamente. Esta mujer está considerando el hecho como totalmente anormal y dentro de la sexualidad la normalidad está pautada por el consentimiento o disfrute que ambas personas experimentan del acto sexual, pero cuando uno de los componentes de la pareja está a disgusto con una determinada práctica se considera dentro de la sexología clínica y el hecho cae dentro de la anormalidad.
14- ¿Cierto que hay hombres que hacen eso porque son fetichistas y sienten placer ante la ropa femenina usada?
-Exactamente como lo hemos afirmado en respuestas anteriores.
15-¿O de alguna manera es una conducta masturbatoria?
-Hay personas que eventualmente frente a un fetiche pueden autoerotizarse o masturbarse porque ese fetiche actúa como un elemento disparador de su excitación.
16- Los que necesitan contar detalles íntimos de sus relaciones con mujeres, ¿no esconden en realidad una homosexualidad latente o escondida?
-No tiene nada que ver con la homosexualidad, simplemente puede ser un síndrome de farsa sexual, que ya hemos mencionado o bien que esas manifestaciones sean reales o imaginarias, lo hacen sentir bien.
17- Otra teoría acerca de este tipo de hombres es que simplemente son machistas y no valoran a la mujer, ¿es así?
-Sí, esa posibilidad es otra alternativa de lo que nosotros estamos conversando.
18- ¿Son más machos sexualmente los mujeriegos o los que respetan sus relaciones y no andan contando sus intimidades?
-Lo que nos hace sentir adecuadamente “machos” es que la relación sexual sea buena, adecuada, euforizante, no sea negativa y deprimente, pero eso en la realidad, no en la fantasía.
19- Los hombres que no harían el amor si no pudieran contarlo, son también los que suelen decir con sospechosa frecuencia: “yo le degeneré a esa mujer”. ¿Porqué?
-Muchas veces el hombre es inadecuadamente peyorativo con respecto a sus relaciones sexuales, pero ello lo único que deja traslucir es una falta de consideración y respeto hacia la sexualidad de la mujer con la cual ha tenido o tiene relaciones sexuales.
20- ¿Estamos hablando en realidad de hombres pervertidos, de acomplejados con pene chico, incapaces de amar, machistas o de simples bromistas y poco caballeros?
-Yo acá repito lo que te dije, la gama de variantes de la conducta sexual de la persona es muy amplia y entonces eso ya queda a cargo de que las mismas personas se autoanalicen con respecto a sus manifestaciones.
“Come 2 veces”
Y Maxi Campana, novio de Pabla Thomen, dijo avei que no le ocurre contar a sus socios sus conquistas. “Jamás, un caballero no cuenta sus andanzas”, he’i. Tampoco exhibe “trofeos de guerra”. “Se dice que hombre callado come dos veces”, agregó.
Llevó bombacha
Julio González Cabello dijo: “Yo no soy de mostrar trofeos, eso es solo para mí. Cuando tenía 18 años me llevé el calzón de una mujer de 95 kilos y parecía más que bombacha un calzoncillos. Me parece que quien hace eso es poco hombre, hay que respetar, eso es personal, íntimo”, he’i.
El recuerdo
El famoso cirujano de tops, Arturo Grau, dijo que nunca cuenta sus aventuras sexuales, “para nada, nunca”, asegura. En cuanto a si alguna vez llevó algún bikini como “trofeo”, dijo: “Es mejor el recuerdo de lo que uno hace que llevar algo como un amuleto”.
“Soy una tumba”
“Nunca, jamás, soy una tumba”, dijo el ídolo del Radio Uno, Roberto Pérez. “Como un viejo mariscal me gusta mentalmente recordar la batalla... si alguien muestra alguna ropa íntima de mujer, seguro es porque ni ellos mismos se creen, por eso necesitan de eso”, le bajó
http://www.diariopopular.com.py/?q=node/24682
1- ¿Por qué hay hombres que gustan de tener “pruebas” de sus aventuras, para mostrarles a sus amigos?
-Hay que partir de dos aspectos, uno es que la autoestima del varón se eleva extraordinariamente cuando las relaciones sexuales son adecuadas, positivas y en segundo término tenemos que decir que toda relación sexual, sobre todo las adecuadas, son euforizantes. En nuestro cerebro se liberan sustancias denominadas neurotransmisores como las endorfinas, alfa y beta, que nos hacen sentir bien, en cambio cuando pasa mucho sin que tengamos relaciones sexuales no existe ese estímulo. El hombre se vuelve adicto a las sustancias euforizantes producidas por el acto sexual, entonces, cuantas más relaciones sexuales tenga, mejor. Se siente el rey de la creación, feliz, eufórico. Por el contrario se siente deprimido, fracasado cuando no tiene relaciones sexuales o sus relaciones sexuales no son buenas, porque no hay buena erección o eyacula rápido y no puede satisfacer a la mujer dándole su orgasmo.
2- ¿Es por inseguridad que cuentan sus aventuras o se toma como simple cabezudeada?
-No es por inseguridad, simplemente como expliqué, el hombre quiere sentirse bien, eufórico, muchas veces los éxitos sexuales le satisfacen mucho más que cualquier tipo de éxito y también hay que agregar que la sexualidad adecuada euforiza, pues dinero y poder van juntos.
3- Hay hombres que incluso coleccionan objetos íntimos como bombachitas, corpiños o pelos de pubis, ¿por qué?
-Eso puede ocurrir, incluso el solo hecho de recordar o de apreciar eso que llamás “trofeos” hace sentir al hombre con una autoestima elevada. Pero hay que acotar que no todos los hombres son así. Hay que aclarar que la sexualidad es muy variable, nosotros no podemos encasillar o uniformar las conductas sexuales de las personas sean hombres o mujeres, cada persona tiene su sexualidad muy peculiar, muy particular, muy “suya”.
4- Se habrá enterado del caso del diputado que estuvo durante toda una sesión del Congreso con un colaless en el bolsillo, mostrándoles a sus colegas, ¿se puede considerar que es broma entre hombres o algo más?
-La conducta sexual de las personas es muy variada, muy distinta. Hay personas que desean jactarse de sus aventuras sexuales, en cambio, otras son más reservadas.
5- Hay hasta chistes sobre el hecho de que los hombres disfrutan más de contar sus aventuras sexuales que de tenerlas, ¿por qué?
-Esa pregunta puede tener una doble interpretación, existen hombres que se reúnen entre ellos y se están jactando de sus aventuras sexuales y un poco más allá están las mujeres reunidas y las esposas o parejas de ese mismo hombre están afirmando que “fulano ya no funciona”. Eso se llama indromen, esto en sexología clínica se denomina “síndrome de farsa” sexual y tiende a ser muy común. Es muy difícil que el hombre asuma en su totalidad sus fracasos sexuales, los quiere encubrir, tergiversar, porque incluso esa manera de expresarse levanta su autoestima en cierto modo, se siente mejor contando falsas aventuras entre sus pares.
6- Algunos hombres llaman “trofeos de guerra” a la ropa íntima que les sacan a las mujeres con quienes se acostaron, ¿qué están queriendo decir con esa frase?
-También a esta pregunta podríamos dar 2 interpretaciones. Una es que ellos se sienten bien contando sus aventuras sexuales reales o imaginarias. Pero debemos agregar que existen personas que son fetichistas; esta es una variante de la conducta sexual en la cual la persona hombre o mujer se excita frente a la observación de estas prendas íntimas.
7- ¿Se creen más hombres por eso o es porque quieren fama de mujeriegos?
-No, lo que le hace sentir hombre al hombre es que su autoestima esté elevada por el cúmulo de sus conquistas sexuales y repetimos, que estas pueden ser reales o imaginarias.
8- ¿Qué pensaría la mayoría de los hombres de una mujer que muestre anatómicos como “trofeos de guerra”?
-Nosotros podemos tener la interpretación de que la mujer es fetichista y le gusta mostrar esos “trofeos”.
9- Dicen que las mujeres cuentan el milagro pero no el santo, y los hombres lo primero que cuentan es quién es la mujer con la que se acostaron, ¿es cierto y por qué es así?
-Es así, las mujeres generalmente son más reservadas en sus conquistas sexuales, el hombre en cambio desea publicarlas, esas son características diferenciales de la sexualidad masculina y femenina, pero también tenemos que aclarar todos estos aspectos que estamos afirmando no podemos “generalizarlos”.
10- También dicen que los hombres que cuentan sus aventuras lo hacen mientras no están enamorados, pero que cuando entregan el corazón no quieren hablar de la parte sexual. ¿Es así y por qué?
-Podría ser porque el enamoramiento implica que en el cerebro del hombre se segrega una hormona que se denomina “oxitocina” que es el neurotransmisor o neuro hormona del apego, del enamoramiento y el hombre puede tener relaciones sexuales con muchas mujeres, pero el apego o enamoramiento generalmente ocurre con una sola de ellas, y entonces el hombre no desea exponer a la luz pública la sexualidad de la persona de la cual está enamorada.
11- Mostrarse entre ellos tanguitas o contar detalles sexuales, ¿es una versión más adulta nomás de los “concursos de pene” o de apuntar y orinar que suelen hacer en su pubertad los chicos?
-Eso ya lo hemos contestado en una pregunta anterior.
¿Degenerados o normales?
12- ¿Qué clase de mujeres dejan que el hombre con quien están se lleve sus ropas íntimas, sabiendo que pueden mostrar por ahí?
-Es que muchas veces la mujer no puede oponerse al hecho simplemente.
13- ¿No es lo mismo que dejar que se las filme teniendo relaciones o desnuda?
-Esa es una variante de la conducta sexual de muchos hombres y que generalmente no agrada a la mujer. En mi práctica clínica he tenido mujeres que venían a expresar justamente su extrañeza y hasta malestar por el hecho de que el hombre desea filmar el acto sexual entre ellos, incluso hay hombres que van más allá, les gusta filmar el acto sexual de su pareja con otro hombre, lo cual lastima extraordinariamente a la mujer y desea por supuesto que el problema se resuelva adecuadamente. Esta mujer está considerando el hecho como totalmente anormal y dentro de la sexualidad la normalidad está pautada por el consentimiento o disfrute que ambas personas experimentan del acto sexual, pero cuando uno de los componentes de la pareja está a disgusto con una determinada práctica se considera dentro de la sexología clínica y el hecho cae dentro de la anormalidad.
14- ¿Cierto que hay hombres que hacen eso porque son fetichistas y sienten placer ante la ropa femenina usada?
-Exactamente como lo hemos afirmado en respuestas anteriores.
15-¿O de alguna manera es una conducta masturbatoria?
-Hay personas que eventualmente frente a un fetiche pueden autoerotizarse o masturbarse porque ese fetiche actúa como un elemento disparador de su excitación.
16- Los que necesitan contar detalles íntimos de sus relaciones con mujeres, ¿no esconden en realidad una homosexualidad latente o escondida?
-No tiene nada que ver con la homosexualidad, simplemente puede ser un síndrome de farsa sexual, que ya hemos mencionado o bien que esas manifestaciones sean reales o imaginarias, lo hacen sentir bien.
17- Otra teoría acerca de este tipo de hombres es que simplemente son machistas y no valoran a la mujer, ¿es así?
-Sí, esa posibilidad es otra alternativa de lo que nosotros estamos conversando.
18- ¿Son más machos sexualmente los mujeriegos o los que respetan sus relaciones y no andan contando sus intimidades?
-Lo que nos hace sentir adecuadamente “machos” es que la relación sexual sea buena, adecuada, euforizante, no sea negativa y deprimente, pero eso en la realidad, no en la fantasía.
19- Los hombres que no harían el amor si no pudieran contarlo, son también los que suelen decir con sospechosa frecuencia: “yo le degeneré a esa mujer”. ¿Porqué?
-Muchas veces el hombre es inadecuadamente peyorativo con respecto a sus relaciones sexuales, pero ello lo único que deja traslucir es una falta de consideración y respeto hacia la sexualidad de la mujer con la cual ha tenido o tiene relaciones sexuales.
20- ¿Estamos hablando en realidad de hombres pervertidos, de acomplejados con pene chico, incapaces de amar, machistas o de simples bromistas y poco caballeros?
-Yo acá repito lo que te dije, la gama de variantes de la conducta sexual de la persona es muy amplia y entonces eso ya queda a cargo de que las mismas personas se autoanalicen con respecto a sus manifestaciones.
“Come 2 veces”
Y Maxi Campana, novio de Pabla Thomen, dijo avei que no le ocurre contar a sus socios sus conquistas. “Jamás, un caballero no cuenta sus andanzas”, he’i. Tampoco exhibe “trofeos de guerra”. “Se dice que hombre callado come dos veces”, agregó.
Llevó bombacha
Julio González Cabello dijo: “Yo no soy de mostrar trofeos, eso es solo para mí. Cuando tenía 18 años me llevé el calzón de una mujer de 95 kilos y parecía más que bombacha un calzoncillos. Me parece que quien hace eso es poco hombre, hay que respetar, eso es personal, íntimo”, he’i.
El recuerdo
El famoso cirujano de tops, Arturo Grau, dijo que nunca cuenta sus aventuras sexuales, “para nada, nunca”, asegura. En cuanto a si alguna vez llevó algún bikini como “trofeo”, dijo: “Es mejor el recuerdo de lo que uno hace que llevar algo como un amuleto”.
“Soy una tumba”
“Nunca, jamás, soy una tumba”, dijo el ídolo del Radio Uno, Roberto Pérez. “Como un viejo mariscal me gusta mentalmente recordar la batalla... si alguien muestra alguna ropa íntima de mujer, seguro es porque ni ellos mismos se creen, por eso necesitan de eso”, le bajó
http://www.diariopopular.com.py/?q=node/24682
¿Mujeres objeto? No toda la culpa es de los hombres
Afirmó Helen Alvare en un congreso vaticano
ROMA, lunes, 11 febrero 2008 (ZENIT.org).- Las mujeres han contribuido a fomentar el consumismo que las cosifica, y esto es resultado del pecado original, afirmó Helen Alvare el pasado 9 de febrero en el congreso vaticano celebrado en Roma sobre «Mujer y varón, la totalidad del humanum».
Alvare ha sido portavoz sobre cuestiones relativas a la vida humana de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos y es profesora de la Universidad Católica de América en Washington.
Dado nuestro ambiente de consumismo desenfrenado, «era casi inevitable que los seres humanos se convirtieran en el último producto de consumo --explicó Alvare--. La belleza física de las mujeres y su complementariedad sexual con los hombres, las hacen especialmente deseables en una economía comercial».
«Oscilan las cifras del dinero que se gana con las imágenes sexualizadas de mujeres. Se estima que como mínimo hoy la industria de la pornografía tiene un valor anual de 60.000 millones de dólares. Además se calcula que la pornografía atrae al 40% de todos los usuarios de Internet en Estados Unidos al menos una vez al mes, al 70% de los usuarios de Internet varones entre 18 y 34 años, y a la mitad de todos los clientes de hotel», explicó Alvare.
Sin embargo, añadió, «el grado en el que las mujeres, individualmente y a través de grupos organizados, han asumido su propia cosificación como artículos de consumo es un aspecto especialmente preocupante de nuestra actual situación».
Alvare añadió que «en su serie de charlas sobre la Teología del Cuerpo, y en la "Mulieris Dignitatem", Juan Pablo II habla del efecto del pecado original sobre las mujeres. Repite las palabras que Dios "dirigió a la mujer" tras su primer pecado: ‘Tu deseo se dirigirá hacia tu marido y él te dominará'. Esto indica que la mujer desarrolla un deseo insaciable hacia una unión diferente. No por una relación de comunión sino una ‘relación de posesión del otro como el objeto del propio deseo'».
«Incluso un observador secular tendría que concluir que la cooperación de las mujeres, incluso animando a la cosificación de sus cuerpos hoy, parece una moderna manifestación de la inclinación que los católicos llaman "pecado original". Las mujeres se rebajan a sí mismas persiguiendo la creencia de que esto les llevará a la unión con un hombre».
«Esto no se limita a la industria pornográfica, ni a la publicidad comercial, cine o televisión --subrayó Alvare--. Más bien, las mujeres normales compran ropas diseñadas para destacar o exponer aquellas partes de su cuerpo asociadas con el sexo. Muchas mujeres a menudo también se rebajan a sí mismas con lo que dicen o exponiéndose a sí mismas a medios que gradualmente las insensibilizan ante la propuesta de que las mujeres son objetos de consumo bellos y sexuales».
«Un aspecto final preocupante de la connivencia de las mujeres en su propia consificación --añadió Alvare-- es la implicación de famosas deformaciones del feminismo que insisten en que están marcado un punto a favor de las libertades de las mujeres identificando libertad con sexualidad incontrolada».
«Por otra parte, se puede ver qué fuerte era la tentación de las mujeres de romper con los papeles que se les asignaban antiguamente», «pero esta respuesta del feminismo era y sigue siendo fundamentalmente defectuosa».
Este tipo de feminismo «se ha inspirado para sus orientaciones en los peores aspectos de la conducta masculina. De manera que se animaba a la mujer feminista a ser una criatura aventurera sexual, desdeñosa del matrimonio y los hijos, guiada por el dinero y la carrera --concluyó Alvare--. El feminismo urgía a la mujer a imitar la versión masculina del pecado original -dominación-- para conseguir igualdad y felicidad».
Por Carrie Gress, traducido del inglés por Nieves San Martín
http://www.zenit.org/article-26286?l=spanish
ROMA, lunes, 11 febrero 2008 (ZENIT.org).- Las mujeres han contribuido a fomentar el consumismo que las cosifica, y esto es resultado del pecado original, afirmó Helen Alvare el pasado 9 de febrero en el congreso vaticano celebrado en Roma sobre «Mujer y varón, la totalidad del humanum».
Alvare ha sido portavoz sobre cuestiones relativas a la vida humana de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos y es profesora de la Universidad Católica de América en Washington.
Dado nuestro ambiente de consumismo desenfrenado, «era casi inevitable que los seres humanos se convirtieran en el último producto de consumo --explicó Alvare--. La belleza física de las mujeres y su complementariedad sexual con los hombres, las hacen especialmente deseables en una economía comercial».
«Oscilan las cifras del dinero que se gana con las imágenes sexualizadas de mujeres. Se estima que como mínimo hoy la industria de la pornografía tiene un valor anual de 60.000 millones de dólares. Además se calcula que la pornografía atrae al 40% de todos los usuarios de Internet en Estados Unidos al menos una vez al mes, al 70% de los usuarios de Internet varones entre 18 y 34 años, y a la mitad de todos los clientes de hotel», explicó Alvare.
Sin embargo, añadió, «el grado en el que las mujeres, individualmente y a través de grupos organizados, han asumido su propia cosificación como artículos de consumo es un aspecto especialmente preocupante de nuestra actual situación».
Alvare añadió que «en su serie de charlas sobre la Teología del Cuerpo, y en la "Mulieris Dignitatem", Juan Pablo II habla del efecto del pecado original sobre las mujeres. Repite las palabras que Dios "dirigió a la mujer" tras su primer pecado: ‘Tu deseo se dirigirá hacia tu marido y él te dominará'. Esto indica que la mujer desarrolla un deseo insaciable hacia una unión diferente. No por una relación de comunión sino una ‘relación de posesión del otro como el objeto del propio deseo'».
«Incluso un observador secular tendría que concluir que la cooperación de las mujeres, incluso animando a la cosificación de sus cuerpos hoy, parece una moderna manifestación de la inclinación que los católicos llaman "pecado original". Las mujeres se rebajan a sí mismas persiguiendo la creencia de que esto les llevará a la unión con un hombre».
«Esto no se limita a la industria pornográfica, ni a la publicidad comercial, cine o televisión --subrayó Alvare--. Más bien, las mujeres normales compran ropas diseñadas para destacar o exponer aquellas partes de su cuerpo asociadas con el sexo. Muchas mujeres a menudo también se rebajan a sí mismas con lo que dicen o exponiéndose a sí mismas a medios que gradualmente las insensibilizan ante la propuesta de que las mujeres son objetos de consumo bellos y sexuales».
«Un aspecto final preocupante de la connivencia de las mujeres en su propia consificación --añadió Alvare-- es la implicación de famosas deformaciones del feminismo que insisten en que están marcado un punto a favor de las libertades de las mujeres identificando libertad con sexualidad incontrolada».
«Por otra parte, se puede ver qué fuerte era la tentación de las mujeres de romper con los papeles que se les asignaban antiguamente», «pero esta respuesta del feminismo era y sigue siendo fundamentalmente defectuosa».
Este tipo de feminismo «se ha inspirado para sus orientaciones en los peores aspectos de la conducta masculina. De manera que se animaba a la mujer feminista a ser una criatura aventurera sexual, desdeñosa del matrimonio y los hijos, guiada por el dinero y la carrera --concluyó Alvare--. El feminismo urgía a la mujer a imitar la versión masculina del pecado original -dominación-- para conseguir igualdad y felicidad».
Por Carrie Gress, traducido del inglés por Nieves San Martín
http://www.zenit.org/article-26286?l=spanish
Más abuso contra las mujeres
Por: Lola Salcedo Castañeda
DE CADA 100 COLOMBIANOS DIEZ emigraron, lo que nos remite a un total cercano a los cuatro millones de personas y al 10 por ciento de la población.
Esta población, sin rostro para el Estado, envía un aporte mensual a la familia que sobrevive acá: madres, hijos, hermanos menores, y para más INRI, la mayoría son mujeres. Gracias a ellas el país contabilizó, en 2007, cerca de cuatro mil millones de dólares que, con seguridad, fueron a parar al mercado de bienes de consumo, tales como alimentación, ropa y alquiler. Y coincido con mi par Adolfo Meisel Roca en que lo hicieron con lágrimas, sudor y privaciones en la poco amable vida que llevan los inmigrantes, donde han podido asentarse y que se fueron fundamentalmente porque el Estado no les cumplió en seguridad, trabajo, asistencia social, salud ni educación.
Ahora bien, no es cierto que trague entero ni que me meten el dedo a la boca los gobernadores del Caribe cuando hacen eco de la propuesta del Gobierno de caerle a un porcentaje de esas remesas para invertir en la región. ¡Ay! Adolfo, eres economista y de los mejores, pero yo tenía que asesorarme sobre el tema y ese fue el tiempo que te permitió titular con lastimera frase tu columna sobre el argumento de marras. Titular llamativo pero innecesario, porque tuviste que reconocer que sólo registraba la propuesta. Y tus argumentos no me convencieron, me ratificaron en mi rechazo a tan absurda e inhumana pretensión, que tanto regocijo produjo en nuestros mandatarios departamentales. Ese ¡ay!, tenías que personalizarlo en ellos. Pero dudo mucho que lo hicieras para referirte a Berrío, de Bolívar o Verano, de Atlántico: a los hombres no se les escriben esos titulares, sólo a las mujeres.
Lo que me regresa al punto clave de este comentario. Según los investigadores, como dije antes, la mayoría de las remesas provienen de mujeres que, por razones de género, sufren doble maltrato: como inmigrantes y como féminas: menos paga, mayor exigencia, acoso sexual y, desde luego, los peores empleos. Basta con mirar la industria de la confección en cualquier parte, desde Nueva York a Hong Kong, para comprobar las condiciones infrahumanas como trabajan y viven. Para no referirme a la prostitución impuesta, otra forma de esclavitud que poca atención recibe cuando los grandes dignatarios se reúnen a discutir políticas de migración: los que la reciben, aúllan en contra de los ilegales y los que la proporcionan, como Colombia, sólo tienen ojos para las remesas. Y el Estado colombiano apenas estudia los lineamientos para crear una política integral de migraciones: con el 10 por ciento de su población desprotegida y sobreviviendo en el exterior.
Según la propuesta presentada por el Programa de Ecología Histórica y Movilidad Humana del CES de la Universidad Nacional, es necesario que “se consideren estos procesos migratorios como parte fundamental de las políticas sociales y económicas y de la estrategia de lucha contra la pobreza”. Definen a los migrantes como población altamente vulnerable y conciben la pobreza como característica contextual, no como condición individual, y concluyen que, por tanto, la lucha contra ésta debe ser por la expansión de la libertad.
El Ministerio de Relaciones Exteriores tiene el documento que preparó la Nacional bajo la dirección de Gerardo Ardila, a quien agradezco la información y asesoría. Confiemos en que muy rápido pase a convertirse en una política real y efectiva, que permita a esa mayoría de mujeres regresar con oportunidades de ser personas con derechos o permanecer en el extranjero, pero protegidas y respaldadas por el Estado, sea el gobierno que fuere.
http://www.elespectador.com/opinion/columnistasdelimpreso/lola-salcedo-castaneda/columna-mas-abuso-contra-mujeres
DE CADA 100 COLOMBIANOS DIEZ emigraron, lo que nos remite a un total cercano a los cuatro millones de personas y al 10 por ciento de la población.
Esta población, sin rostro para el Estado, envía un aporte mensual a la familia que sobrevive acá: madres, hijos, hermanos menores, y para más INRI, la mayoría son mujeres. Gracias a ellas el país contabilizó, en 2007, cerca de cuatro mil millones de dólares que, con seguridad, fueron a parar al mercado de bienes de consumo, tales como alimentación, ropa y alquiler. Y coincido con mi par Adolfo Meisel Roca en que lo hicieron con lágrimas, sudor y privaciones en la poco amable vida que llevan los inmigrantes, donde han podido asentarse y que se fueron fundamentalmente porque el Estado no les cumplió en seguridad, trabajo, asistencia social, salud ni educación.
Ahora bien, no es cierto que trague entero ni que me meten el dedo a la boca los gobernadores del Caribe cuando hacen eco de la propuesta del Gobierno de caerle a un porcentaje de esas remesas para invertir en la región. ¡Ay! Adolfo, eres economista y de los mejores, pero yo tenía que asesorarme sobre el tema y ese fue el tiempo que te permitió titular con lastimera frase tu columna sobre el argumento de marras. Titular llamativo pero innecesario, porque tuviste que reconocer que sólo registraba la propuesta. Y tus argumentos no me convencieron, me ratificaron en mi rechazo a tan absurda e inhumana pretensión, que tanto regocijo produjo en nuestros mandatarios departamentales. Ese ¡ay!, tenías que personalizarlo en ellos. Pero dudo mucho que lo hicieras para referirte a Berrío, de Bolívar o Verano, de Atlántico: a los hombres no se les escriben esos titulares, sólo a las mujeres.
Lo que me regresa al punto clave de este comentario. Según los investigadores, como dije antes, la mayoría de las remesas provienen de mujeres que, por razones de género, sufren doble maltrato: como inmigrantes y como féminas: menos paga, mayor exigencia, acoso sexual y, desde luego, los peores empleos. Basta con mirar la industria de la confección en cualquier parte, desde Nueva York a Hong Kong, para comprobar las condiciones infrahumanas como trabajan y viven. Para no referirme a la prostitución impuesta, otra forma de esclavitud que poca atención recibe cuando los grandes dignatarios se reúnen a discutir políticas de migración: los que la reciben, aúllan en contra de los ilegales y los que la proporcionan, como Colombia, sólo tienen ojos para las remesas. Y el Estado colombiano apenas estudia los lineamientos para crear una política integral de migraciones: con el 10 por ciento de su población desprotegida y sobreviviendo en el exterior.
Según la propuesta presentada por el Programa de Ecología Histórica y Movilidad Humana del CES de la Universidad Nacional, es necesario que “se consideren estos procesos migratorios como parte fundamental de las políticas sociales y económicas y de la estrategia de lucha contra la pobreza”. Definen a los migrantes como población altamente vulnerable y conciben la pobreza como característica contextual, no como condición individual, y concluyen que, por tanto, la lucha contra ésta debe ser por la expansión de la libertad.
El Ministerio de Relaciones Exteriores tiene el documento que preparó la Nacional bajo la dirección de Gerardo Ardila, a quien agradezco la información y asesoría. Confiemos en que muy rápido pase a convertirse en una política real y efectiva, que permita a esa mayoría de mujeres regresar con oportunidades de ser personas con derechos o permanecer en el extranjero, pero protegidas y respaldadas por el Estado, sea el gobierno que fuere.
http://www.elespectador.com/opinion/columnistasdelimpreso/lola-salcedo-castaneda/columna-mas-abuso-contra-mujeres
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